Dulces posibilidades en una Cuba libre

Recientemente conocí a una mujer cubana poco más de 10 años menor que yo, que llegó a los Estados Unidos desde Cuba hace varios años. Juntos hemos estado recopilando informacion mediante una encuesta sobre la historia de Cuba  para compartir con el mundo en la plataforma (cubanswithwings.com) . No podía creer lo que escuchaba por su pregunta sugerida para el número 9: . 9-Si vives en Cuba cuantas veces al año comes chocolate? | Si vive en Cuba, ¿cuántas veces al año come chocolate?

¿¡Qué!? Ni siquiera pensaría en proponer esa pregunta porque seguramente Cuba es un productor natural de todos los ingredientes necesarios para hacer chocolate. Pensé que alguna forma de chocolate sería al menos una ración que se ofrecería en algún lugar de la isla o durante ciertas temporadas o en días festivos especiales. (Espere, descarte esa idea. Castro prohibió la religión y todos los días festivos que la acompañaron y los antaño de Cuba).  

Pero ciertamente debe haber chocolate en Cuba; después de todo, Milton S. Hershey de la Hershey Chocolate Company en Hershey, Pensilvania, una vez tuvo varios molinos de chocolate en Cuba e incluso fundó y construyó una ciudad alrededor de "su molino más productivo al que llamó Hershey, Cuba ; al que Castro luego renombró Camilo Cienfueges. Me enteré de este mismo hecho en mi reciente visita al Museo de la Fundación Cubana en el Museo de Artes y Ciencias en Daytona, Florida. Mientras estaba en el museo, vi no uno, sino dos modelos del molino Hershey Central (construido en 1919 y terminado en 1926) en lo que una vez se conoció como la ciudad Hershey cerca de Santa Cruz, Cuba. Esta ciudad incluso incluyó su propio Ferrocarril Eléctrico Hersheyque aún sigue vigente hasta el día de hoy. Aquí hay fotografías de ambos modelos comenzando con el "modelo a escala de 1/16 de pulgada" más pequeño construido por un empleado del molino, Enrique Ortiz Lima, durante la construcción del molino. Estos modelos fueron exhibidos, luego vendidos y finalmente comprados por el ex presidente cubano Fulgencio Batista en una subasta. Estos modelos, junto con todos los elementos de la galería, eran colecciones personales dentro de la casa de la familia Batista en Daytona y estos elementos fueron donados al Museo Cubano en 1974.   

Debo admitir que, antes de mi visita, esperaba aprender más sobre la historia política de Batista en el museo, siendo nieto de un ex policía militar de Batista. En cambio, no encontré nada en exhibición asociado con su anterior presidencia o su política para ese asunto. En cambio, encontré una colección artística y cultural única y rara de la historia de la era de la República de Cuba, una que también incluía aspectos destacados de los éxitos económicos pasados ​​de Cuba.  

Por supuesto que compartí las fotografías de mi museo con mi nueva amiga y ella no tenía idea de este hecho en la Historia de Cuba.  "Como, la compania Hershey tenia una factoria en Cuba?" El mismo Hershey que hace todos los chocolates que se comen aqui en los estados unidos? ¡No te lo creo! "  Cada vez que veo a mi nuevo amiga de Cuba parece que nos enseñamos algo nuevo sobre nuestra propia historia cubana. Pero lo que más me entriztece encontrar con estas discusiones es lo poco que la generación cubana más joven sabe realmente acerca de su propia historia cubana, bastante extraordinaria. Solo aprenden la historia de la Revolución y esa versión que el gobierno cubano. quiere que sepas. "A menos que hayan conocido y vivido con un padre o abuelo anciano que vivió la historia, no te la enseñaron", confirma mi nuevo amigo. También confesó ser una amante del chocolate y admitió tristemente que solo comía chocolate en Cuba dos veces al año si tenía suerte. En esas raras ocasiones, solo le dieron un bon bon cada vez, a menos que sus padres y abuelos le dieran su ración. Por lo que' No es de extrañar que haya comido chocolate en exceso a su llegada a los EE. UU. durante meses. Es difícil para un recién llegado cubano no sentirse abrumado emocionalmente con las muchas opciones disponibles y opciones de comida y todo lo que encuentran fuera de Cuba.     

En un intercambio similar, le mostré a mi nueva amiga fotografías de supermercados cubanos que había encontrado y fijado en Pinterest antes de la Revolución (antes de 1959) como las que se muestran aquí; de nuevo, la dejé en total incredulidad. Nunca se había imaginado que Cuba tuviera una vez tan buenos supermercados y acceso a comida. Luego compartió algunas fotografías de los mercados cubanos de hoy y esta vez, fui yo el que quedó horrorizado. Fue incluso peor de lo que había visto en publicaciones anteriores en las redes sociales y en este famoso video de Youtube " Todo lo que has visto sobre Cuba es una mentira." Aquí hay una cita de uno de los documentalistas con respecto a sus hallazgos en la historia del supermercado cubano local y la hora de espera en la línea de retiro de efectivo: "Literalmente no había fruta fresca, ni carne fresca, ni verduras frescas, nada ... una marca de las cosas que tienen ". Es por eso que todos los cubanos exiliados recuerdan su primera visita a la tienda de abarrotes.(o su primera visita a Piccadilly). Sí, esta primera experiencia en el supermercado es realmente una cosa de refugiados cubanos; pero para aclarar, este no fue el caso de la generación de mis abuelos que tuvieron que dejar su vida como la conocían por una comunidad menos desarrollada en un nuevo país. Ha sido particularmente triste para mí en particular observar, desde mi nacimiento de todos modos, la continua y creciente destrucción de Cuba a lo largo del tiempo a manos del comunismo. La Cuba de hoy es irreconocible para los exiliados cubanos que escaparon de la ira de Castro en 1959 hasta la década de 1960. Ver esta destrucción y no poder hacer nada al respecto causó un corazón roto a cada exiliado cubano desde entonces. 

Así que volvamos al chocolate: para ser honesto, no puedo imaginar una vida sin chocolate. Es una indulgencia personal que comparto tanto con mi madre como con mi hija. Creo que incluso pueden amar el chocolate más que a mí en estos días. El sabor del chocolate perdura en todos los recuerdos de mi infancia; Personalmente no puedo imaginar una vida sin chocolate, como la vivieron muchos cubanos hoy y fue vivida por mi nueva amiga. Pero no tiene por qué ser así, ya sabes. Nunca debería haber tenido que ser así. Comprar chocolate en Cuba para cubanos no debería ser tan difícil, caro y exclusivo. Después de todo, Cuba es el hogar de una variedad de granos de cacao y produce y fabrica este chocolate de Baracoa de renombre mundial. Según este artículo de 2020, “La Empresa Agroforestal y Coco de Baracoa ha exportado casi 700 toneladas de cacao beneficiado de primera (tipo A) y de segunda calidad (tipo B) en lo que va de año, a través de la empresa estatal Cubaexportadora”. Entonces, si el cubano común no puede comprar o acceder fácilmente al chocolate de Baracoa y otros chocolates producidos en Cuba, ¿quién lo está consumiendo? No el pueblo cubano, a menos que lo cultiven o lo vendan al gobierno. Supongo que vivo cerca del molino de chocolate para el caso. Puede comprar chocolate cubano en países como Suiza, Inglaterra, Italia, España, Venezuela, México y muchos países del mundo, ya sea que estén haciendo chocolate con el cacao cubano importado o vendiendo las barras cubanas importadas hechas en Cuba. Y como siempre, si eres un turista que visita Cuba,                  

¿Pero te imaginas todas las dulces posibilidades en una Cuba libre? Y la posibilidad de una Cuba libre ya no es solo un mito, una idea surrealista, un sueño imposible o un deseo incumplido. Esta semana, el 15 de noviembre de 2021, el pueblo cubano planea protestar pacíficamente por la libertad . Se han programado más de 100 protestas en todo el mundo para mostrar solidaridad y apoyo a los cubanos en la isla que arriesgan sus vidas para protestar pacíficamente en este día.  

¿Qué tan dulce sería devolver la cultura del chocolate a la cultura cubana , que la reinventó hace siglos? ¿No sería bueno hacer que el chocolate esté tan disponible y asequible en Cuba que ningún amante del chocolate cubano pueda vivir sin el sabor de este simple placer? El chocolate como la libertad nunca debería ser un privilegio. En una Cuba libre, se puede celebrar la historia y el legado del chocolate de Cuba. Incluso podemos traer de vuelta la panadería cubana. Apuesto a que es difícil para el estadounidense familiarizado con la rica cultura cubanoamericana de Miami entender que las panaderías y cafeterías cubanas que encuentran en cada cuadra simplemente no existen en Cuba, pero alguna vez existió. Oh, me deleito con la idea de una Cuba libre y todas las dulces posibilidades que vendrán con la libertad.